viernes, 27 de julio de 2012

FABULAS TODOSANTEÑAS: la fábula de televisa y telmex


Muchas veces nos pasa que pensamos que los enemigos de nuestros enemigos son nuestros amigos. Así, por ejemplo, apoyamos a cualquier movimiento que esté contra el PRI, o a cualquier empresa que esté contra Televisa. Por lo general, es demasiado tarde cuando nos damos cuenta de que los enemigos de nuestros enemigos no son nuestros amigos--sólo la ley es nuestra amiga, y en ella debemos depositar nuestro apoyo, confianza y presión para que castigue la corrupción y disuelva los monopolios; tanto en el caso de nuestros enemigos, como en el de los enemigos de nuestros enemigos.

LA FABULA DE TELEVISA Y TELMEX @tlilcuauhtli

El gato montés tenía tan aterrorizados a los animalitos de la sierra que, un buen día, estos se reunieron para dar fin a todas sus penas. El sabio coyote recomendó que invitaran de inmediato a su prima la loba para que los ayudara a correr a ese peligrosísimo animal. Pero sucedió que, cuando llegó la loba, esta no pudo deshacerse del felino, aunque sí pudo engullir a la mitad de los animalillos que no cupieron en el vientre del rey de la sierra. El coyote entonces confirmó que era cierto que entre los depredadores se peleaban, pero muy tarde comprendió que por lo que peleaban era por comerse a los demás. “No le pidas a un gigante que trabaje para enanos,” se lamentaba, mientras crujía en los dientes de su prima.

viernes, 20 de julio de 2012

FABULAS TODOSANTEÑAS: la Guacamaya y el Cuervo

Esta es una de mis favoritas fábulas de @rodtripper porque trata sobre la importancia de saber decir que No. Muchas veces nos pasa que queremos darlo todo y no queremos lastimar a los demás; lo que no pensamos es que ser dadivosos puede malear a los demás y dejar las cosas aún peores. 

Para mi, la lección que desprendo de esta fábula es que ayudar es ayudar a ayudarse, y todo lo demás es ayudar a mantener las cosas igual, o inclusive a empeorarlas. 

Lo que me gusta del estilo de @rodtripper es que nunca remata con una moraleja explícita, sino que nos ayuda a que la busquemos por nosotros mismos. Me encantaría ver si alguno de ustedes tiene una moraleja con la cual cerrar este post, ya saben que están invitadísimos a comentar.

LA GUACAMAYA Y EL CUERVO @rodtripper

Paseaba la Guacamaya por la selva luciendo sus hermosas plumas, cuando se posó en una rama al lado del Cuervo, éste sintió envidia de su plumaje pero hábilmente la disfrazó de admiración y se deshizo en cumplidos hacia la Guacamaya. 

- Eres tan majestuosa y noble que nada te costará regalarme una de tus plumas.

La Guacamaya dudó un instante pero después reflexionó, nada le quitaba donar una de sus plumas multicolores a esa pobre ave monocromática y así lo hizo. Al poco tiempo llegó el simio que vio que el cuervo tenía una de las bellas plumas y presionó a la Guacamaya para que le donara también una, ella por no quedar mal, accedió. Así fueron desfilando ante la Guacamaya todos los animales de la selva hasta que la dejaron sin su hermoso plumaje y después de eso no le volvieron a prestar atención. 

martes, 10 de julio de 2012

FABULAS TODOSANTEÑAS: el coyote y la pitahaya


Este es un proyecto que estamos armando a dos manos @rodtripper y su servidor. La idea es tejer un libro de fábulas muy mexicanas sobre temas bien contemporáneos. Actualmente tenemos acumuladas como unas veintitantas fábulas en bruto, sobre temas que van desde el vuelo del autoestima hasta el serpentear de los monopolios. En realidad nos encantaría que nos dieran ideas y que nos compartieran su opinión sobre la redacción. También estaríamos muy agradecidos si nos contactaran con alguien interesado en realizar las ilustraciones y, ¿porqué no?, con alguna editora de libros artesanales. En fin, les vamos a estar compartiendo una fabulilla cada semana, y por allí les iremos contando de los avances con este proyecto. Saludos y muy feliz semana!

FABULAS TODOSANTEÑAS por @rodtripper y @tlilcuauhtli

LA FABULA DE LOS EJIDATARIOS Y EL "REALTOR"

Andaban la cachora, la churea y la liebre por el áspero camino a Batequito, cuando encontraron una pitahaya tirada. La liebre se agachó para tomarla, pero entonces la churea le picó su patita gritando "¡esa no es para ti porque el otro día pateaste mi nido!" Entonces la churea extendió el ala hacia la tuna, sólo para que la cachora se la mordiera vociferando "¡no, no! esa es para mí porque cuando yo era niña tú me pisaste la cola." Terminó armándose un gran alboroto que despertó la atención del coyote, quien todavía no acababa de preguntar "bueno, ¿qué pasa?" cuando ya estaban los animalitos desbordándose en acusaciones mutuas. El viejo coyote escuchó atentamente mientras saboreaba la pitahaya, luego le pasó a cada animalito las semillas diciendo “mejor pónganse a sembrar camaradas, que la grilla es un árbol que no da pitahayas.”